miércoles, 17 de abril de 2013

¿Dónde estamos en el Universo?


Los astrónomos comienzan a ubicar a la Tierra en el lugar correcto del Cosmos, un enigma que nos ha inquietado desde el principio de los tiempos
¿Dónde estamos en el Universo?  
La Tierra, vista desde la Luna

Nuestro afán y curiosidad por conocer dónde nos encontramos y buscar nuestra posición en el Cosmos ha sido desde siempre una prueba a superar. Ha sido un largo camino que en ocasiones nos ha colocado en lugares equivocados, casi siempre motivado por ideas que no tienen nada que ver con la ciencia. Por ello, nuestra inquietud para conocer el lugar en el Universo donde nos hallamos ha fracasado de manera estrepitosa, pero a pesar de ello, parece que comenzamos a ver el camino correcto.

Para emprender el largo sendero que nos ha llevado a casi entender dónde nos encontramos, hay que partir desde muy atrás en el tiempo. Primero tuvimos que aprender a conocer qué era nuestro planeta; ¿un mundo plano o tal vez una esfera? Casi todas las civilizaciones pensaron que nos encontrábamos en un mundo plano y que al llegar a su final caeríamos al abismo. En realidad existía pánico en llegar al supuesto final de los océanos y caer, quién sabe dónde.

La Tierra es redonda. Pitágoras (582 a. C.-507 a. C.), piensa que la Tierra es una esfera, porque es la figura geométrica más perfecta, pero no tiene forma de demostrarlo. Para ello habría que esperar a Eratóstenes (Cirene, 276 a. C.-Alejandría, 194 a. C.). En la ciudad de Siena, ahora Asuán, notó que en el solsticio de verano, cuando el Sol está en todo lo alto, los objetos verticales no proyectaban sombras, pero en Alejandría sí lo hacía, con un ángulo de 7o 12’ con respecto a Siena. Como conocía la distancia entre ambas ciudades, era fácil averiguar la circunferencia de la Tierra. Una regla de tres nos determina la circunferencia de la Tierra: si entre ambas ciudades hay X km y tienen una diferencia de 7o 12’, en 360º habrá X km. Bien, el resultado fue de 39.614,4 km, frente a los admitidos actualmente de 40.008, es decir, lo clavó, y a partir de aquí no había dudas de que la Tierra era una esfera. De forma empírica se comprueba con el viaje alrededor de la Tierra de Magallanes y Elcano, finalizado en 1522. Hasta 1961 no vería el hombre por primera vez la redondez de la Tierra desde el espacio, gracias al cosmonauta soviético Yuri Gagarin.

La Tierra es el centro del Sistema Solar. Pero el hecho de conocer la esfericidad de la Tierra no nos acercaba a nuestra posición en el Sistema Solar. El astrónomo y geógrafo Claudio Ptolomeo (85 d.C.-165 d.C.) publicó en el siglo II su obra maestra; ‘Almagesto’, en el que decide colocar a la Tierra como centro del Sistema Solar. Esta idea perduró en el tiempo unos 1.400 años, hasta el 1543. ¡1.400 años perdidos! Es una de las grandes ideas equivocadas que más ha perdurado en el tiempo, aunque Aristóteles (384 a. C.-322 a. C.) ya enseñaba este peculiar pensamiento, aun sabiendo que había pruebas en contra, como que Mercurio y Venus nunca se separan mucho del Sol, por lo tanto giran alrededor de él y no de la Tierra. En fin, teníamos que ser el centro de todo, aunque no somos de nada, como seguiremos viendo.

Ahora la Tierra no es el centro del Sistema Solar. Oficialmente, es Copérnico quien sitúa al Sol en el centro del Sistema Solar, aunque esta idea probada llega desde muy atrás en el tiempo y procede de Aristarco de Samos (310-230 a. C.). La obra de Copérnico ‘De revolutionibusorbiumcoelestium’, sobre el Heliocentrismo (el Sol en el centro del Sistema Solar), es publicada en 1543. Así pues, para situarnos un poco, sabemos que oficialmente la Tierra no es el centro del Sistema Solar. Hemos quedado desplazados.

Tampoco somos el centro de la Vía Láctea. Damos un paso de gigante para saltar a nuestra Galaxia, la Vía Láctea. Por comparación, nuestra galaxia es como una inmensa playa y nuestro sistema solar sería sólo un grano de arena, el resto de los granos son otras estrellas. Nuestra Galaxia es una isla en el Universo, con cien mil millones de estrellas. Pero existen al menos otras cien mil millones de galaxias similares. La Vía Láctea es como un disco de música, plano y con brazos espirales, con un abultamiento central o bulbo. Tiene unas dimensiones de 100.000 años luz (un año luz equivale a 9,6 billones de km.). Estas cifras marean, pero aún no nos hemos alejado mucho en el Universo. Un rayo de luz tardaría en alcanzar la otra punta de la galaxia 100.000 años viajando a 300.000 km/s. Esta es nuestra isla cósmica.

A principios del siglo XX, el astrónomo Kaptein comenzaba a dar el tamaño en cifras de la Vía Láctea, pero se quedó corto en sus mediciones, aunque se empezaba a ver la luz, pero erró al acercar el Sistema Solar al centro de la Vía Láctea. Craso error. El astrónomo Harlow Shapley, que trabajaba en el Observatorio de Monte Wilson, observó que la mayoría de los cúmulos globulares, que son grupos esféricos de hasta un millón de estrellas en apelotonada multitud y que giran alrededor de la galaxia, lo hacían hacia el centro de ella, que es donde hay más fuerza de gravedad al haber mayor concentración de estrellas. Esto indicaba que el Sistema Solar estaba muy lejos del centro de la galaxia, a unos 30.000 años luz de él, casi en los suburbios de la Vía Láctea. Otra vez quedamos desplazados.

El grupo Local de galaxias es un cúmulo de galaxias, las más cercanas a la Vía Láctea, incluyendo ésta. Es un grupo de más de 50 miembros, de modo que la mayor de esas galaxias es la de Andrómeda, el doble que la nuestra y con el doble de estrellas (200.000 millones). La segunda en tamaño es la Vía Láctea, con más de 20 galaxias satélites que giran a nuestro alrededor, siendo las más famosas las Nubes de Magallanes, sólo visibles a simple vista desde el hemisferio sur. Dentro de muchos años la galaxia de Andrómeda nos absorberá, así como al resto de galaxias del Grupo Local, creando una galaxia gigante.
El supercúmulo de Virgo

Unos 100 cúmulos de galaxias “próximas” como nuestro cúmulo, el Grupo Local, conforman una macroestructura cósmica de 200 millones de años luz de diámetro, denominado el Supercúmulo de Virgo, conteniendo más de mil galaxias. El Grupo Local gira alrededor del centro del Supercúmulo de Virgo, que lo forma un cúmulo de galaxias denominado el cúmulo de Virgo, pero lo hacemos en su periferia, a unos 60 millones de años-luz. Quien domina el núcleo de esta gigantesca estructura, es la supergalaxia M 87, una galaxia esférica que contiene un billón de estrellas y un tamaño cinco veces mayor que la Vía Láctea. Dentro de muchos años nuestro destino será caer hacia aquella galaxia, al igual que todas las galaxias del Supercúmulo de Virgo.

Si no nos hemos perdido ante tal enormidad, continuamos. El conjunto de los supercúmulos cercanos conforman otra inimaginable megaestructura cósmica denominada el Hipercúmulo de Virgo. Éste se compone de algunas decenas de los supercúmulos de galaxias “cercanos”, entre ellos el supercúmulo de Virgo. La Gran Muralla es la segunda mayor estructura cósmica conocida. Se compone de algunos hipercúmulos de galaxias, entre ellos el nuestro, el Hipercúmulo de Virgo. La gran Muralla mide 500 millones de años luz de largo.

La Muralla de Sloan es la mayor estructura conocida del Universo. Fue descubierta recientemente, en 2003. Tiene una extensión inimaginable de 1.400 millones de años luz (1.400 millones multiplicado por 9,6 billones sería el resultado del tamaño en km.). Otro de los grandes misterios del Universo es el denominado Gran Atractor, una fuerza descomunal, que hace que miles de galaxias, incluida la nuestra, se dirijan hacia él.

El Universo es como una esponja, tal vez redonda, que se hincha como un globo a cada momento que pasa. En la superficie de ese globo existen cavidades como la esponja. Las galaxias, los cúmulos de galaxias, los hipercúmulos y otras estructuras mayores están pegados a las paredes de esas cavidades, dejando grandes huecos, como si fueran espacios vacíos o pompas. Pero en esos huecos habita la Materia Oscura, materia que existe, pero que no se ve y se deja notar por su fuerza de gravedad. En realidad sólo vemos el 10 por ciento de la materia del Universo el resto es materia oscura. Mientras, el Universo se expande y las galaxias, a nivel global se separan. Caben dos posibilidades futuras para el Universo. Puede llegar un momento en que la expansión se frene y caiga sobre sí mismo, volviendo a reunificarse toda la materia y energía en un sólo punto, para volver a explotar en un proceso cíclico infinito, pero puede que el Universo se expanda indefinidamente. Con el tiempo, las estrellas se apagarán, las galaxias dejarán de existir y el Universo desaparecerá, al menos el nuestro, aunque es probable que existan otros universos.

domingo, 29 de enero de 2012

Científicos reproducen las condiciones físicas de las estrellas con un láser

Puede cubrir una distancia de hasta dos kilómetros y generar una radiación mil millones de veces más intensa que cualquier otra en el mundo.


LONDRES.- Científicos de la Universidad de Oxford recrearon las condiciones de las estrellas usando un láser de rayos X capaz de producir tanta energía como la producida en toda Bélgica, según lo que informa la revista británica Nature.

El láser puede llegar a cubrir una longitud de hasta dos kilómetros y es capaz de generar una radiación mil millones de veces más poderosa que cualquier otra fuen
te en el mundo.

Los expertos utilizaron esta herramienta, llamada Linac Coherent Light Source(LCLS), para calentar una lámina de metal hasta que alcanzó una temperatura de dos millones de grados centígrados en menos de una billonésima de segundo.

Que el metal se calentara tan rápido permitió que los científicos reprodujeran las condiciones de temperatura y presión que normalmente tienen las estrellas.

"Lograr materia densa y caliente es importante en el ámbito científico para comprender el tipo de condiciones que se dan en el interior de las estrellas y en el centro de los planetas gigantes, tanto en nuestro sistema solar como fuera de él", afirmó Sam Vinko investigador del Departamento de Física de la Universidad de Oxford.

Además Vinko expresó su esperanza de que el LCLS tenga múltiples aplicaciones en otros ámbitos de la ciencia, a parte de la astrofísica, como la ingeniería de materiales y la investigación biológica.

domingo, 22 de enero de 2012

Misterioso hexágono de Saturno emerge de la oscuridad



Después de esperar años para que el sol ilumine otra vez el polo norte de Saturno, las cámaras de a bordo de la nave espacial Cassini de la NASA han captado las imágenes más detalladas de la intrigante forma hexagonal que corona el planeta.

Las nuevas imágenes del hexágono, cuya forma es el camino de una corriente en chorro que fluye alrededor del polo norte, revelan círculos concéntricos.

Después que la luz del sol se desvaneció, la oscuridad cubrió el Polo Norte durante 15 años. Para el deleite y desconcierto de los científicos de Cassini, la ubicación y la forma del hexágono en las últimas imágenes coinciden con lo que vimos en las fotos del Voyager. "La longevidad del hexágono lo hace algo especial, dado que el clima en la Tierra tiene una duración del orden de semanas ", dijo Kunio Sayanagi, un asociado de Cassini en el Instituto de Tecnología de California. "Es un misterio a la par con las condiciones del clima extraño que dan lugar a la  Gran Mancha Roja de Júpiter."

El hexágono fue descubierto originalmente en imágenes tomadas por la nave espacial Voyager a principios de 1980. Rodea a Saturno a unos 77 grados de latitud norte y se estima que tienen un diámetro mayor que dos Tierras. La corriente en chorro que se cree que corre a lo largo del hexágono a unos 100 metros por segundo (220 millas por hora).

Las primeras imágenes de la Voyager  y telescopios terrestres sufrieron desde la perspectiva de una visión deficiente. Cassini, que ha estado orbitando Saturno desde el año 2004, tiene un mejor ángulo para ver el polo norte, pero la larga oscuridad del invierno saturniano ocultó el hexágono de la luz visible de Cassini durante años.

Instrumentos infrarrojos, sin embargo, fueron capaces de obtener imágenes mediante el uso de patrones de calor. Esas imágenes mostraron que el hexágono es casi estacionario y se extiende profundamente en la atmósfera. También descubrieron un punto de acceso y el ciclón en la misma región.
Las cámaras de luz visible del subsistema de Cassini, que tienen mayor resolución que los instrumentos infrarrojos y las cámaras de Voyager, consiguió su tan esperada visión del hexágono en enero, cuando el planeta se acercó al equinoccio.

Los científicos del equipo de imágenes calibradaron y cosieron 55 imágenes para crear un mosaico de cine y tres cuadros. Los mosaicos no se muestran directamente en la región alrededor del polo norte, ya que aún no había salido de la noche de invierno en ese momento.

Los científicos aún están tratando de averiguar lo que hace que el hexágono, donde se pone y expulsa su energía y cómo se ha mantenido tan organizado durante mucho tiempo. Ellos planean buscar en  las nuevas imágenes nuevas  pistas, teniendo una mirada especialmente cerca de las olas recientemente identificadas que se irradian desde las esquinas del hexágono - donde el chorro se vuelve más difícil - y la estructura de pared múltiple que se extiende hasta la parte superior de la capa de nubes de Saturno en cada uno de los seis lados del hexágono.


Los científicos también están especialmente intrigados por una gran mancha oscura que aparece en una posición diferente en la imagen anterior de infrarrojos de la Cassini.

 "Ahora que podemos ver ondulaciones y rasgos circulares en vez de manchas en el hexágono, podemos empezar a tratar de resolver algunas de las preguntas sin respuesta acerca de una de las cosas más extrañas que he visto en el sistema solar ", dijo Baines. "La resolución de estas preguntas sin respuesta sobre el hexágono nos ayudará a responder a preguntas básicas sobre el tiempo que todavía estamos preguntando sobre nuestro propio planeta."


viernes, 20 de enero de 2012

Fragmentos de meteorito marciano vale 10 veces más que el oro



Los expertos han confirmado que los pedazos del meteorito que cayó en Marruecos en julio de 2011 fueron la mayor parte de origen marciano.
Ellos tienen ahora un valor de varios miles de dólares la onza.


Caído en una bola de fuego en julio de 2011 en Marruecos , se encuentra en forma de bloques de 1 a 7 kilogramos, este meteorito desató rápidamente la envidia de los astrónomos y aficionados, que especularon sobre su origen marciano. Apuesta ganadora!

Las pruebas llevadas a cabo por expertos dirigidas por Chris Herd vienen a confirmar: que los minerales valiosos son desprendidos del Planeta Rojo, es probable que hace millones de años, después de un impacto cósmico, antes de ir al sistema solar y, finalmente, entrar en la atmósfera. Como un "regalo" que no sucedía del cielo desde 1962.

Incluso antes de anunciar los resultados, los museos, las universidades y los científicos de la NASA ya había ofrecido grandes sumas de dinero para las muestras de esta rara "mercancía". Hoy en día, estos fragmentos son comercializados entre 11.000 y 22.500 dólares la onza (es decir, de 8.500 a 17.600 euros para menos de 30 gramos). Esto corresponde a cerca de 10 veces el valor del oro, dice el Telegraph .

 Ninguna misión espacial todavía no ha sido capaz de traer este tipo de material en la Tierra.






Dos astrónomos aficionados descubren nuevo planeta


Para ayudar a 'pelar' las imágenes del cosmos, la Universidad de Oxford  pidió voluntarios para el análisis. 

Recientemente, dos de estos aprendices astrónomos han descubierto un nuevo planeta extrasolar, situado cerca de una estrella muy lejana.

Probablemente de gas, aproximadamente del tamaño de Neptuno y, probablemente, demasiado caliente para mantener la vida, el planeta que orbita una estrella llamada SPH10066540, distante 600 a 3000 años luz de la Tierra,  este nuevo exoplaneta es todavía muy poco conocido.

Fue descubierto por Chris Holmes y Threapleton Lee, dos astrónomos principiantes aficionados, quienes  como muchos otros, respondieron al llamado de la Universidad de Oxford.

Recientemente, la institución ha publicado en el sitio Planethunters.org imágenes tomadas por el telescopio espacial Kepler de la NASA, y pidió a los voluntarios que indicaran sobre algunas variaciones de luz, que pudieran indicar la presencia de planetas.

 Si la existencia de este nuevo mundo se confirma,  tendrá la alegría de darle su nombre: "Threapleton Holmes B".

Phobos-Grunt: el rastro de un error de diseño



Jueves, el jefe de la Agencia Espacial Rusa, anunció que Vladimir Popovkin formó un equipos para definir las causas del accidente de la Phobos-Grunt, está considerando un error de diseño o fabricación de la máquina.

El fracaso de la misión  Phobos-Grunt se completó con la caída de la máquina a tierra. Amargo incidente, además de otras que ya se han producido en el año 2011, la Agencia Espacial Rusa ha anunciado planes para investigar y determinar las causas del fracaso.

 Desde entonces, todas las pistas se consideran. A principios de esta semana, la comisión competente para la investigación habrían discutido una posible perturbación en el funcionamiento de un radar de EE.UU.  durante el despegue del suelo de Fobos-Grunt.

Pero hoy se estima: un error de diseño o fabricación de la sonda.

Otras versiones son los errores en las fases de construcción y pruebas de diseño, dijo Vladimir Popovkin, jefe de Roskosmos citado por RIA Novosti .

Lanzado desde el cosmódromo de Baikonur, en Kazajstán 09 de noviembre 2011, Phobos-Grunt se suponía que tomaría muestras de suelo en la luna marciana Fobos y regresaría a la Tierra en tres años. Su análisis podría ayudar a aprender aún más sobre el Planeta Rojo, pero este giro de los acontecimientos rápidamente pone en peligro la misión. Una reunión para analizar  las causas del accidente debe llevarse a cabo 31 de enero.

lunes, 16 de enero de 2012

Caen en el Pacífico los restos de la sonda rusa Fobos-Grunt


El ministerio de Defensa calcula que fue a mil 250 km de la isla chilena Wellington.

Rusia calcula que los fragmentos de su sonda marciana defectuosa Fobos-Grunt cayeron este domingo en el océano Pacífico en torno a las 17:45 GMT, a mil 250 km de la isla chilena Wellington, de acuerdo con un responsable del Ministerio de Defensa.

“Según nuestros cálculos (...) la caída de fragmentos de la nave Fobos-Grunt debió producirse a las 21:45 hora de Moscú en el océano Pacífico”, declaró el coronel Alexei Zolotujin, portavoz de las fuerzas espaciales rusas, citado por la agencia de noticias Interfax.

Posteriormente, con la agencia estatal Itar-Tass, precisó que los restos cayeron a mil 250 km al oeste de la isla chilena Wellington.

Las fuerzas espaciales del Ministerio de Defensa controlaron la última fase de la salida de órbita, explicó el portavoz.

“Esto permitió pronosticar con gran probabilidad el lugar y la hora de la caída”, recalcó el coronel.
Por el momento ha sido imposible contactar con Roscosmos, que no ha logrado predecir con exactitud la zona de impacto de la sonda.

Imprecisiones

La última información disponible en su página web sobre la situación es de las 16:15 GMT y anunciaba que la caída se produciría entre las 17:50 y las 18:34 GMT en el Atlántico.
La agencia de noticias Ria Novosti afirmó por su parte que los fragmentos de la Fobos-Grunt habían caído en el Atlántico, cerca de la costa brasileña.

Pero horas antes una fuente del sector espacial vaticinó, en declaraciones a Interfax, que los fragmentos caerían “a 120 km al oeste de la ciudad argentina de Rosario”.
Fobos-Grunt, que debía dirigirse hacia un satélite de Marte para tomar muestras, fracasó en su intento de franquear la atracción terrestre.

Esta sonda, que costó 165 millones de dólares, debía significar el regreso de Rusia a la exploración interplanetaria, abandonada tras el fracaso en 1996 de la sonda Marte 96, que cayó al Pacífico.
Rusia tendrá dificultades para establecer las causas de este fracaso, estimó el domingo un responsable del sector espacial ruso citado por Interfax. “No tenemos prácticamente datos telemétricos del aparato, los datos indirectos no son suficientes”, declaró.

Mal año

Uno de los peores años para el sector espacial ruso fue 2011. El último fracaso en sus proyectos fue el 23 de diciembre, cuando un satélite de comunicaciones militares y civiles cayó en Siberia por un desperfecto del cohete Soyuz que lo llevaba a su órbita.

Y todavía fue peor el fracaso en agosto del lanzamiento de una nave de reabastecimiento hacia la Estación Espacial Internacional que paralizó durante tres meses las salidas hacia ese complejo.



La isla Wellington está situada en el océano Pacífico en la región austral de Chile, al sur del golfo de Penas, al comienzo de los canales patagónicos, frente a los Campos de Hielo Sur. Forma parte del archipiélago Wellington. Tiene una superficie de 5.566 km², que la convierten en la 3ª isla mayor de Chile.